En
este tipo de experimento el material está sometido a una tensión de
cizalla y se permite que la tensión vaya disminuyendo manteniendo una
deformación constante, es decir, la longitud no varía. La figura muestra la disminución en tensión para un material viscoelástico con
deformación constante.
El
tiempo de relajación es el tiempo necesario para que la tensión para
deformación constante caiga hasta 1/e (donde la constante exponencial e es igual a 2,718) de su valor inicial (es
decir, un 38% de su valor original). Si este valor es excesivo pueden considerarse
otros tiempos de relajación arbitrarios, como por ejemplo, el tiempo necesario
para que la tensión descienda hasta un 50% o 70% de su valor inicial.
Muller
(1973) afirma que el tiempo de relajación es igual a la relación µ/G, donde µ es el coeficiente de
viscosidad y G el módulo de cizalla.
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